La comunidad de Balsa Las Perlas, en Río Negro, lleva más de siete días sin suministro de agua corriente, a raíz de la rotura de una bomba clave para el abastecimiento. La situación, que comenzó el jueves pasado, se mantiene sin resolución efectiva pese a las promesas del municipio de Cipolletti, responsable del servicio.

En diálogo con Radio 7, Juan Celedonio, vecino del barrio, denunció la falta de previsión y abandono por parte del Estado municipal y provincial. “Esto no es un problema técnico. La bomba no tiene ninguna complejidad especial. El problema es que nunca tienen un repuesto y eso demuestra desaprensión total”, afirmó. La ausencia de soluciones rápidas profundiza el malestar de los vecinos.

Según Celedonio, la falta de agua expone a la comunidad a múltiples dificultades cotidianas: higiene, cocina, y acceso al agua potable, especialmente para familias con niños y personas mayores. Algunos vecinos lograron resolverlo con reservas propias o yendo hasta Neuquén para cargar agua, pero muchos no tienen medios para hacerlo.

La situación se enmarca en un contexto más amplio de precariedad en los servicios básicos para los más de 20.000 habitantes de Las Perlas. “No tenemos hospital, ni gas, ni alumbrado público. Trabajamos, nos educamos y nos atendemos en Neuquén, porque Cipolletti nos da la espalda”, detalló Celedonio.

Desde el Municipio de Cipolletti, el secretario de Gobierno Julio Dijkstra explicó que recién el miércoles de esta semana sacarían la bomba para diagnosticar si puede repararse. Si no es posible, deberían conseguir una nueva, pero advirtieron que podría haber demoras por la falta de stock. “Es una bomba más grande que las habituales”, sostuvo.

Los vecinos aseguran que el municipio no actuó durante el fin de semana largo y que la reparación recién comenzó días después del reclamo inicial. Además, denuncian que los trabajadores municipales que deben hacer las tareas de reparación no reciben el pago de horas extras desde abril.

La falta de respuesta concreta por parte de las autoridades podría derivar en nuevas medidas por parte de la comunidad, que ya analiza acciones colectivas para visibilizar el problema. “Vamos a seguir informando a los medios, y si no hay solución vamos a tener que presionar, como siempre”, advirtió Celedonio.