Un terremoto de magnitud 7,5 sacudió el extremo sur de Chile en la madrugada de este viernes generando al menos 17 réplicas posteriores, pero sin provocar un tsunami, según confirmaron las autoridades del Servicio Nacional de Prevención y Respuesta ante Desastres (Senapred).

Según supo Noticias Argentinas, el epicentro se localizó a 218 kilómetros al suroeste de Puerto Williams, en la región de Magallanes, en una zona donde convergen tres placas tectónicas activas, aunque menos frecuentes que las del norte del país.

La directora de Senapred, Alicia Cebrián, señaló que si bien hubo leves variaciones en el nivel del mar, entre 6 y 23 centímetros, estas fueron registradas solo por sensores en bases como Prat, O’Higgins y la base ucraniana Vernadski, sin consecuencias perceptibles para la población.

Por precaución, se había emitido una alerta preventiva en toda la región austral, incluyendo la ciudad de Punta Arenas, donde nació el presidente Gabriel Boric, quien canceló su agenda para monitorear la situación desde el Palacio de La Moneda.

Desde el Centro Sismológico Nacional, el director Sergio Barrientos explicó que el evento fue generado por el movimiento de la placa Antártica al deslizarse bajo la placa de Scotia, provocando un levantamiento del fondo oceánico.

En la vecina Ushuaia, al sur de Argentina, se sintió el temblor y se recomendó a la población estar atenta a la información oficial. El municipio advirtió que la probabilidad de tsunami era baja gracias a que las islas Hoste y Navarino actúan como barrera natural.

Algunos vecinos decidieron autoevacuarse por precaución, aunque no hubo evacuaciones oficiales ni reportes de daños o víctimas hasta el momento. Especialistas recordaron que no se registraba un sismo de esta magnitud en la región desde 1949, cuando un terremoto de 7,9 grados sacudió la misma zona.