
Una mujer fue rescatada de una situación de trata de personas en una chacra ubicada en San Patricio del Chañar, luego de una intervención conjunta entre la fiscalía federal, la Gendarmería Nacional y el Centro de Atención a la Víctima (CAV), que depende del gobierno neuquino. El operativo se originó por una denuncia recibida a través de la línea nacional 145, canal de referencia para este tipo de delitos.
La denuncia llegó el sábado a través de Protex, la Procuraduría de Trata y Explotación de Personas, que derivó el caso a la fiscalía federal con asiento en Cutral Co. Desde allí se activó el protocolo de rescate con la participación del equipo especializado que lidera Silvia Bascur, directora del Centro de Atención a la Víctima en Neuquén.
Aunque se presumía que había entre ocho y diez personas en situación de explotación, solo una aceptó el rescate y asistencia del Estado. Según confirmó Bascur, las condiciones de vida eran inhumanas, con habitaciones sin calefacción, colchones mínimos en el piso, y sin baño en el interior de las instalaciones, en pleno invierno patagónico.
La víctima, una mujer oriunda de Tucumán, llegó engañada con la promesa de empleo en el sector petrolero. Posee formación terciaria y, ante la falta de oportunidades, aceptó un trabajo temporal en la chacra, que terminó siendo una situación de explotación laboral. Su DNI fue extraviado o robado, impidiéndole incluso retornar a su provincia de origen.
El caso es aún más grave porque no es la primera vez que se denuncia trata en esa chacra. Según afirmó Bascur, se trata de un lugar con antecedentes en este tipo de delitos. Aunque no se brindó el nombre de la empresa responsable por estar bajo investigación federal, la reincidencia en ese establecimiento fue confirmada.
El resto de los trabajadores no aceptó la asistencia del Estado, ya que muchos optan por quedarse a cobrar lo adeudado o buscar trabajo en otras chacras. Volver a sus provincias sin dinero y en condiciones de vulnerabilidad extrema representa un costo emocional y económico muy alto, por lo que eligen permanecer a pesar del maltrato.
El operativo implicó la coordinación entre diversos organismos del Estado, desde el Ministerio de Seguridad hasta el Registro Civil, para restituir la identidad de la víctima y garantizarle asistencia integral. Desde el gobierno provincial, se sostuvo que no puede no haber respuesta del Estado ante estas situaciones.
La línea 145 fue clave para activar el procedimiento de rescate. Bascur destacó que, tras una llamada, la intervención puede activarse en una o dos horas en la región, y por eso se insiste en su difusión. La funcionaria remarcó la necesidad de pensar una solución estructural para evitar la precarización de los trabajadores rurales golondrina en la región.