
Un hombre con pedido de captura vigente por robo calificado en la provincia de Corrientes fue detenido en la ciudad de Neuquén. La aprehensión se concretó luego de un operativo realizado por la división de captura de la policía provincial, en coordinación con la fiscalía de investigaciones de Curuzú Cuatiá.
La orden fue emitida por el fiscal Oscar Cañete, quien aportó información clave para localizar al sospechoso. La justicia correntina solicitó colaboración a las autoridades neuquinas luego de reunir pruebas de que el prófugo se habría trasladado al sur del país tras cometer el hecho delictivo.
El detenido había participado de un robo bajo la modalidad “entradera”, contra una persona mayor de edad. Tras perpetrar el delito, abandonó Corrientes y se instaló en Neuquén antes de que se cargara formalmente el pedido de captura en el sistema nacional, lo que le permitió permanecer en la zona durante al menos seis meses sin ser detectado.
La investigación local se activó una vez recibida la alerta oficial, y culminó con un operativo cerrojo en el centro de la capital neuquina. En diálogo con Radio 7, el comisario Marcelo Aquito, jefe de la División de Captura de Neuquén, explicó que el sospechoso fue identificado tras rastrear publicaciones en redes sociales que permitieron ubicarlo en las cercanías de su lugar de trabajo.
El hombre trabajaba en una panadería de manera informal y residía en una vivienda precaria al sur de la ciudad. Al momento del operativo, no ofreció resistencia, aunque se mostró sorprendido al ser interceptado por efectivos policiales que ya contaban con su descripción física y ubicación probable.
Según detalló Aquito, no es inusual que personas con causas penales abiertas se trasladen hacia el sur del país, buscando evadir la justicia. Hace dos semanas, otro caso similar involucró a un prófugo oriundo de Salta, también detenido en Neuquén. La mayoría de estos casos están vinculados a delitos de índole penal o privada.
Una vez detenidos, los implicados son puestos a disposición de la justicia neuquina, que se encarga de iniciar los trámites para su traslado. En este caso, Corrientes cuenta con un plazo de 30 días para gestionar la extradición del detenido, quien permanece alojado en una unidad policial de orden público.
La captura de prófugos de otras provincias —e incluso de otros países— en Neuquén pone en debate la necesidad de mejorar los mecanismos de alerta y control. La demora en cargar pedidos de captura en los sistemas nacionales facilita el ocultamiento de los implicados y representa una debilidad en la articulación judicial entre jurisdicciones.