
Hay alarma en el sistema de salud por situaciones de conflicto entre los usuarios y el personal que otorga los turnos, lo que a lleva a episodios de violencia constante. “El problema es que no tenemos la cantidad de turnos para la demanda existente”, expresó Fernando Martínez, Delegado de Gestión de Pacientes.
Las citas se manejan por medio de la aplicación de celular ANDES, y también se maneja por ventanilla. “Si bien la aplicación se originó para darle una solución a los pacientes para que no esperen por horas durante la noche afuera de los centros de salud, pero no está funcionando del todo bien en algunos aspectos”, menciono Fernando Martínez y agregó, “la gente está optando por venir a hacer fila y permanecen toda la noche para sacar un turno”.
Está dividido por porcentaje entre los que se entregan por ventanilla y en la aplicación, pero la diversificación se hizo de manera equivocada. Los turnos que se otorgan de manera presencial no alcanzan para cubrir la cantidad de gente que va personalmente. “De esta manera se genera el descontento de los usuarios y lleva al conflicto con los trabajadores”.
Por otro lado los días que se dan turnos para especialidades son los más complicados, al tener días específicos se concentra el doble o triple de gente. “Con los compañeros decidimos que vamos a dar los turnos como se hacía antiguamente”, mencionó Fernando Martínez.
“En algunos aspectos la aplicación ANDES funciona bien, en general es de esta manera, pero también es cierto que otras cosas no lo hacen de manera correcta”, remarcó el Delegado de Gestión de Pacientes. También agregó “queremos ser parte de la solución, marcar falencias para poder solucionarlas y llevarla adelante”.
El conflicto no es solamente en el Heller sino en todos los hospitales, se repiten estas situaciones problematicas debido al enojo de los usuarios.
La realidad que atraviesan los hospitales y centros de salud en general de la provincia es bastante complicada, cada vez hay más enojo por parte de los vecinos de cada zona por la falta de turnos y la dificultad para conseguirlos, sobre todo las largas horas de espera durante la noche.