Un dramático hecho de inseguridad vial y violencia posterior sacudió a un barrio de Neuquén capital. Un nene de 6 años fue atropellado por una moto que realizaba maniobras peligrosas, y debió ser intervenido quirúrgicamente tras sufrir una grave lesión en la cabeza.

El accidente ocurrió el viernes alrededor de las 20 horas, sobre calle Primero de Enero, una arteria asfaltada que los vecinos describen como “una autopista sin control”.

“Mi nieto estaba con su bicicleta, parado para cruzar, cuando pasaron unos chicos en moto haciendo wheelie. Uno lo atropelló. Voló varios metros. Lo llevamos de urgencia al hospital porque la ambulancia nunca llegó”, relató entre lágrimas María Hilda Martínez, la abuela del menor.

El niño fue trasladado primero al Hospital de Cipolletti y luego al Hospital Regional de Neuquén, donde fue operado de urgencia.

“Tenía una vena que sangraba mucho. Tuvieron que quitarle un pedacito de hueso de la cabeza. Estuvo en terapia, pero gracias a Dios ahora está en sala común”, contó la mujer.

La historia tomó un giro aún más preocupante cuando, según denunció la familia, los mismos jóvenes que circulaban en la moto regresaron al domicilio de las víctimas y realizaron disparos al aire, exigiendo que les devolvieran la llave del vehículo que había sido retenida por el padre del nene.

“Vinieron a casa a la noche, después del accidente. Andaban en un Gol Tren oscuro. Dispararon al aire para intimidarnos. Es una locura. Tuvimos miedo por los chicos”, relató Martínez.

La mujer aseguró que la Comisaría 21 “actuó mal” durante el operativo y que no convocaron a Tránsito en el momento del hecho. Recién más tarde la motocicleta fue secuestrada y el conductor identificado.

“Tuvieron que esperar que nosotros nos moviéramos para que actúen. Todo lo hicieron mal”, afirmó la abuela.

Cansados de los excesos de velocidad y la ausencia de controles policiales, los vecinos del sector cortaron calle Primero de Enero entre las 19 y las 21 horas del sábado, en una manifestación pacífica para exigir mayor seguridad vial.

“Queremos semáforos y reductores de velocidad. A la noche pasan motos y autos a toda velocidad, haciendo piruetas. Hoy fue mi nieto, mañana puede ser otro chico”, advirtió Martínez.

Durante el corte se sumaron familiares y residentes de la zona, quienes firmaron una nota dirigida al intendente para reclamar medidas urgentes.

Sin embargo, ningún funcionario municipal se acercó al lugar. Solo el presidente de la comisión vecinal acudió después de finalizada la protesta para expresar su apoyo.

“La calle Primero de Enero parece una pista de carreras. Los autos y motos circulan sin control, y no hay presencia policial ni cámaras”, señaló una vecina durante la manifestación.

El hecho revive las denuncias de los vecinos sobre la falta de presencia del municipio y la policía en la zona, donde ya se registraron otros accidentes similares.

La familia del niño permanece junto a él en el hospital, y aguarda su recuperación mientras avanza la investigación judicial sobre el motociclista implicado.

“Queremos justicia y seguridad. No queremos más chicos atropellados ni familias amenazadas”, concluyó María Hilda Martínez.