
A un mes de la sanción de las ordenanzas que habilitan el funcionamiento de plataformas digitales de transporte como Uber o Cabify en la ciudad de Neuquén, la actividad aún no está en vigencia y no hay fecha precisa de inicio del servicio. Si bien la normativa ya fue publicada en el Boletín Oficial, la Subsecretaría de Transporte tiene un plazo de hasta cuatro meses para reglamentar el funcionamiento efectivo del sistema. Esto implica que, mientras tanto, cualquier conductor que opere con estas aplicaciones está sujeto a sanciones y secuestros de vehículos por parte del municipio.
Durante las últimas semanas, al menos seis vehículos fueron retenidos y multados por ofrecer viajes mediante plataformas aún no habilitadas, pese a la aprobación general del servicio. Desde el área de control se advierte que este tipo de actividad se considera ilegal hasta tanto no se termine de implementar el marco reglamentario necesario para su funcionamiento. Las autoridades insisten en que el proceso está en marcha y que se trabaja para tener todo listo incluso antes del plazo máximo previsto.
Mientras tanto, la aplicación municipal Taxi Go, impulsada por el Ejecutivo como alternativa legal, sigue creciendo. Actualmente cuenta con más de 840 choferes registrados y alrededor de 2.300 usuarios activos, consolidándose como una herramienta eficiente y segura para los viajes dentro de la ciudad. El municipio busca fortalecer esta opción antes de que ingresen las grandes plataformas internacionales, aunque aseguran que no habrá restricciones una vez que se reglamente el nuevo sistema.
En paralelo, el borrador de reglamentación ya anticipa requisitos estrictos para las empresas interesadas en operar. Deberán abonar un canon inicial de 15 millones de pesos, además de un aporte mensual de 1,2 millones. En cuanto a los choferes, deberán contar con licencia profesional, seguros al día y vehículos con una antigüedad no mayor a siete años. Estos parámetros buscan igualar las exigencias con las que ya cumplen los taxistas y remiseros de la ciudad.
Desde la Subsecretaría de Transporte confirmaron que varios conductores ya consultaron cómo ingresar legalmente al sistema una vez habilitado, pero también reconocieron que hay quienes están trabajando sin esperar la reglamentación. Para el municipio, esto representa una complicación tanto operativa como política, ya que mientras avanzan con la implementación deben seguir realizando controles para evitar que el servicio se desarrolle por fuera de la legalidad.
La habilitación formal fue votada por amplia mayoría en el Concejo Deliberante en el mes de junio, con 14 votos a favor y solo una abstención. A pesar del respaldo político, la iniciativa generó un fuerte debate público y protestas por parte del sector taxista, que reaccionó con cortes de calles y manifestaciones frente al edificio legislativo. Los taxistas reclamaron por la competencia que implicará la llegada de las aplicaciones, aunque finalmente suspendieron nuevas medidas tras la aprobación.
El oficialismo municipal, que promovió la ordenanza, remarcó que la prioridad es garantizar un sistema transparente, seguro y regulado, que no afecte a los trabajadores del transporte tradicional. También indicaron que Uber, Cabify y otras plataformas interesadas ya presentaron documentación preliminar y se mantienen en contacto con el Ejecutivo para avanzar en la incorporación formal al sistema de movilidad urbana de la capital neuquina.
En este contexto, la ciudad de Neuquén se encuentra en una etapa de transición en materia de transporte, con expectativas de modernización, tensiones sectoriales y un calendario reglamentario en marcha que definirá el futuro del servicio. Mientras tanto, los usuarios deberán seguir esperando para contar con estas nuevas alternativas de viaje, cuya llegada parece inminente pero aún sin fecha cierta.