
El Gobierno de Neuquén declaró la emergencia por sequía ante la persistente falta de precipitaciones y la escasez de nieve en las cuencas cordilleranas. La medida fue anunciada por el gobernador junto al subsecretario de Producción Marcelo Zúñiga, con el objetivo de anticipar los impactos sobre la ganadería, agricultura y riesgo de incendios en la provincia durante la primavera y el verano próximos.
Según Zúñiga, varias regiones de la provincia conviven desde hace años con sequías prolongadas, que este invierno se agravaron por la escasez de nieve, afectando tanto el turismo como la disponibilidad de agua en los valles irrigados. Los informes del INTA y los equipos provinciales de emergencia evidencian un nivel crítico de recursos hídricos, lo que obliga a medidas urgentes de asistencia a los productores.
El gobierno provincial prevé un aumento del presupuesto en más del 450%, alcanzando 4437 millones de pesos destinados a créditos y aportes no reintegrables. Parte de estos fondos se orientará a mejoras en infraestructura agropecuaria, como perforaciones, aguadas, reservorios, alambrados y refugios, mientras que otra parte se destina a suplementos forrajeros y fondos rotatorios para garantizar la subsistencia animal.
La línea de crédito ampliada ofrecerá tasas de interés bajas del 10%, con períodos de gracia extendidos y trámites simplificados, buscando facilitar el acceso de pequeños, medianos y grandes productores. Según Zúñiga, esto representa un esfuerzo único del Estado provincial, sin aporte del gobierno nacional, destinado a sostener la producción en contextos de emergencia.
Para los productores más vulnerables que no pueden acceder a créditos, se implementarán aportes no reintegrables, especialmente para situaciones de emergencia o subsistencia, incluyendo forraje, infraestructura de agua y acompañamiento técnico. La estrategia busca reducir la mortalidad animal y mejorar la planificación de pastizales y la ganadería regenerativa.
Zúñiga explicó que los productores que realizan la transumancia podrán recibir acompañamiento en los arreos y desplazamientos de animales, asegurando que los ejemplares improductivos puedan ser comercializados y no pierdan valor por muerte en el campo. Esta medida busca maximizar los recursos disponibles y mantener la viabilidad de los establecimientos ganaderos.
En paralelo, se están atendiendo preocupaciones de productores frutícolas y hortícolas en Vista Alegre, Chañar y Centenario, relacionadas con seguridad, urbanización y circulación de vehículos pesados. El gobierno provincial trabaja en infraestructura de riego y mejoras técnicas, priorizando la gestión del agua y la planificación urbana conjunta con los municipios.
Finalmente, la subsecretaría de Producción realiza evaluaciones permanentes del impacto de la sequía sobre la producción ganadera, el consumo y la disponibilidad de carne. Las medidas combinan créditos, aportes no reintegrables y acompañamiento técnico, garantizando que las familias en situaciones críticas puedan acceder a los recursos necesarios para subsistir y mantener su actividad productiva.