Trabajadores del Instituto Nacional de Tecnología Agropecuaria (INTA) realizaron este jueves 19 de junio una panfleteada y banderazo en Plottier, sobre la Avenida Autovía Circunvalación, como parte de una jornada nacional en rechazo a los despidos en el organismo. La protesta fue organizada en el marco de la campaña “Defensa del INTA” y contó con la participación de empleados nucleados en la Asociación de Trabajadores del Estado (ATE).
La movilización tuvo réplicas en distintas localidades de Neuquén y Río Negro, con el objetivo de visibilizar el conflicto y alertar sobre el impacto que tendría el ajuste propuesto por el Gobierno Nacional. Los trabajadores denunciaron que se busca desmantelar áreas clave del instituto, lo que pondría en riesgo tanto investigaciones como programas de extensión rural.
“Defendemos una institución estratégica para el país”, manifestaron desde ATE, al tiempo que reclamaron la reincorporación de los empleados despedidos. Aseguran que el INTA no sólo genera conocimiento científico, sino que es fundamental para el desarrollo sostenible de las economías regionales y la soberanía alimentaria.
El banderazo y la distribución de panfletos fueron acompañados por el respaldo de productores, vecinos y organizaciones sociales, que se acercaron para expresar su solidaridad. Los manifestantes desplegaron carteles, banderas argentinas y entregaron material informativo a los automovilistas que transitaban por la zona.
Los despidos en el INTA forman parte de un recorte mayor impulsado por el gobierno nacional, que incluye otros organismos públicos de ciencia y técnica. Según denunciaron los trabajadores, la medida responde a una política de ajuste que prioriza el achicamiento del Estado por sobre la inversión en conocimiento.
El INTA, con más de 60 años de historia, cumple un rol clave en la investigación agropecuaria, brindando apoyo técnico y promoviendo prácticas sustentables en todo el país. Los empleados recordaron que sus tareas son esenciales para productores pequeños y medianos, especialmente en regiones como la Patagonia.
Desde ATE advirtieron que las protestas continuarán si no hay respuesta a los reclamos, y adelantaron nuevas medidas de lucha en defensa de los puestos de trabajo y del rol estratégico del instituto. “El INTA no se toca”, fue una de las consignas centrales de la jornada, que se desarrolló sin incidentes.
El reclamo vuelve a poner en discusión el rumbo de las políticas públicas en ciencia, tecnología y producción, y evidencia la preocupación creciente por la pérdida de capacidades estatales en áreas fundamentales. Los trabajadores reiteraron su pedido de diálogo y la inmediata reversión de los despidos.
