
Tras más de 100 días de conflicto, el intendente de Allen, Marcelo Román, y los gremios ATE, Soyem y UPCN alcanzaron un acuerdo salarial en las últimas horas, que puso fin al paro municipal iniciado el 7 de julio.
El acta establece un incremento acumulativo superior al 8%, distribuido de manera escalonada: 0,7% mensual por julio, agosto y septiembre (2,1% total), más un 2% en noviembre, otro 2% en diciembre y un último 2% en enero.
“Se ha llegado a un acuerdo que quizás no es del todo satisfactorio, pero entendemos que las finanzas de la comuna no son las mejores”, dijo Sebastían Betanzo, Delegado de ATE en Allen, en Radio 7.
Además, el Ejecutivo Municipal se comprometió a no aplicar descuentos por días de paro ni sanciones a los trabajadores que participaron de las medidas.
“La verdad es que financieramente han hundido al Municipio de Allen”, agregó.
En este sentido, sostuvo que uno de los motivos principales de esta realidad es que “se malgastó una masa salarial en fiestas y no pensaron directamente en lo que podía llegar a pasar”.
Además, aclaró que más allá de este arreglo, la ciudad no está en las mejores condiciones para trabajar por la falta de insumos.
“Hoy la ciudad se encuentra, más allá de este arreglo salarial, sin muchos insumos con los cuales trabajar”.