La Iglesia Maradoniana, una comunidad de fanáticos que reverencia a Diego Armando Maradona como un ícono supremo del fútbol y de la cultura popular, celebró este 30 de octubre su tradicional evento central, la Navidad Maradona. En esta ocasión, el encuentro tuvo lugar en Rosario, donde seguidores de todo el país se reunieron para conmemorar lo que ellos consideran el nacimiento de una leyenda: el cumpleaños de Maradona. Este evento, lleno de simbolismo y emoción, es un momento clave para quienes siguen el legado del “10” no solo por su destreza en el campo de juego, sino por su impacto social, cultural y político en la historia argentina.
La celebración incluyó una variedad de actividades, entre las que destacaron los ya tradicionales bautismos maradonianos, en los que los participantes recrean el famoso gol con la mano de Maradona durante el partido contra Inglaterra en el Mundial de 1986, conocido como la “Mano de Dios”. Esta ceremonia simbólica es una manera de iniciarse en la comunidad, y quienes logran hacer el gol reciben un carnet que los reconoce como “fieles” seguidores de la Iglesia Maradoniana. Durante el evento, los organizadores remarcaron que la participación es inclusiva, permitiendo que tanto adultos como niños sean parte de este ritual, haciendo que el amor por Maradona se transmita de generación en generación.
Uno de los momentos más destacados fue la presencia de las hermanas de Maradona, quienes se unieron a los festejos y compartieron anécdotas familiares, recordando la infancia de Diego en Villa Fiorito y cómo su ascenso en el fútbol transformó sus vidas. En un emotivo gesto, los asistentes cortaron una torta en honor al cumpleaños de Maradona, rodeados de un ambiente cargado de nostalgia y admiración. Según contaron los miembros de la Iglesia, la relación con la familia Maradona es cercana y de mucho respeto, ya que entienden la importancia de mantener vivo el legado del astro de manera genuina y respetuosa.
Durante una entrevista en Radio 7, Hernán Ames, uno de los líderes de la Iglesia Maradoniana, compartió que para ellos, el 30 de octubre es como una especie de Nochebuena, donde se celebra no solo el nacimiento de un jugador de fútbol, sino el de un mito cultural que sigue influyendo en la vida de millones de personas. El evento en Rosario se vivió como una verdadera fiesta, con música, fuegos artificiales y un sentido de comunidad que refleja el espíritu de camaradería que Maradona encarnó a lo largo de su vida. Hernán destacó también que Maradona, a pesar de su éxito y fama mundial, siempre fue una persona generosa, dispuesta a ayudar a quienes lo necesitaban, algo que quienes lo conocieron de cerca aseguran que nunca quiso que se hiciera público.
En la charla también se habló sobre el documental de Netflix “Maradona: Sueño Bendito”, en el que la Iglesia Maradoniana colaboró. Lionel Messi, uno de los más grandes admiradores de Diego, es parte de ese homenaje, y la Iglesia no duda en afirmar que, para ellos, Messi es un maradoniano más. Esto demuestra que, aunque Maradona y Messi a veces son comparados, la comunidad los ve como dos caras de una misma moneda, dos gigantes del fútbol argentino que representan distintos momentos de la historia deportiva del país.
Otro de los hitos del evento fue la colaboración con la ciudad de Nápoles, donde Maradona es adorado como un héroe. Hernán contó cómo un grupo de la Iglesia Maradoniana viajó hasta la ciudad italiana, donde fueron recibidos como embajadores del legado de Diego. Recordó que incluso los napolitanos, al reconocer la camiseta de la Iglesia, mostraron un respeto y devoción increíble hacia Maradona, hasta el punto de detener el transporte público para llevar a los miembros del grupo a su destino. Esta muestra de respeto y amor por Maradona trasciende fronteras y es un testimonio del impacto mundial que el futbolista argentino ha tenido no solo en los terrenos de juego, sino también en las comunidades que se identifican con su historia de lucha, superación y talento.
La comunidad maradoniana se sigue expandiendo, con cientos de miles de seguidores alrededor del mundo. Según sus organizadores, la Iglesia Maradoniana cuenta con una base de datos que en su momento alcanzó los 250.000 miembros, aunque hoy el número exacto no está claro debido a problemas con su sistema. Sin embargo, lo que sí es evidente es que cada vez más personas, de todas las edades y lugares, se sienten atraídas por este movimiento que mezcla la devoción futbolera con un sentido profundo de identidad nacional.
Hernán Ames también habló sobre la relación especial que la Iglesia mantiene con la familia de Maradona y destacó cómo el exjugador fue una figura solidaria, muchas veces ayudando de manera desinteresada a quienes lo necesitaban. Aunque muchas de estas acciones no trascendieron públicamente, la comunidad maradoniana se encarga de mantener viva esta faceta del ídolo, recordando que detrás de la leyenda había un hombre que siempre estuvo dispuesto a tender la mano.
La Navidad Maradona no es solo una celebración futbolística, es un momento de encuentro, de reflexión y de homenaje. Para quienes forman parte de la Iglesia Maradoniana, este evento anual es una oportunidad para reconectar con la figura de Diego desde lo más profundo de su admiración y respeto, perpetuando su legado no solo como un dios del fútbol, sino como un ser humano que dejó una marca imborrable en la historia argentina y mundial. La próxima gran celebración de la Iglesia ya tiene fecha, y será en Villa de Merlo, donde planean seguir difundiendo la pasión por el “10” y haciendo crecer esta comunidad que cada año suma más y más seguidores.