El primer accidente ocurrió a las 7:45 AM, cuando un automóvil Peugeot 207 gris, conducido por un hombre de 26 años, perdió el control tras pasar por el cañadón en dirección a Neuquén desde Centenario. El vehículo volcó y terminó en la cuneta lateral derecha. Personal de tránsito acudió al lugar, constatando que el conductor no tenía seguro, lo que llevó al secuestro del vehículo. Aunque se realizó un control de alcoholemia con resultado negativo, el joven no presentó lesiones y no requirió traslado al hospital.
Mientras se levantaba el automóvil del primer accidente, una hora después, a las 8:45 AM, un Ford Fiesta rojo, que viajaba en dirección opuesta hacia Centenario, protagonizó otro vuelco a unos 100 metros del lugar del primer siniestro. El vehículo, ocupado por tres personas, perdió el control y cayó al cañadón. El conductor fue trasladado al Hospital de Centenario y en el control de alcoholemia se detectó un índice de 2,10 g/l de alcohol en sangre, lo que derivó en el secuestro del automóvil y la iniciación de un expediente administrativo por licencia vencida.
A pesar de los impactos visuales de ambos accidentes, no se registraron heridos graves. En el primer vuelco, el conductor resultó ileso, mientras que en el segundo caso, el traslado al hospital se realizó por prevención, confirmándose posteriormente que no hubo lesiones de consideración.
El comisario Coliman advirtió que la distracción al volante, especialmente al observar incidentes en las rutas, es una de las causas recurrentes de accidentes en la zona. En sus palabras, “la mayoría de los siniestros por alcance ocurren cuando los conductores dejan de mirar la ruta para observar otros eventos”.
Además de estos dos incidentes, el fin de semana largo fue escenario de otros hechos viales destacados. En la esquina de Entre Ríos e Independencia, un hombre de 32 años perdió el control de su vehículo y chocó contra los pilotes de una carnicería. El conductor se retiró del lugar, pero tras ser contactado por las autoridades, regresó y se negó a realizar el control de alcoholemia, lo que derivó en el secuestro del vehículo.