Más de 35 personas han sido víctimas de un engaño relacionado con la compra de terrenos y la construcción de casas en varias ciudades de la región. En diálogo con Radio 7, Rafael Cuchinelli, abogado que representa a los damnificados, explicó que los estafadores ofrecieron propiedades a precios atractivos y financiados en cuotas, pero jamás cumplieron con sus promesas.
Los hechos comenzaron en 2022, cuando los estafadores ofrecieron lotes en Cipolletti, Plottier, y Neuquén, además de casas construidas en esos terrenos. Los afectados entregaron grandes sumas de dinero, confiados en que estarían pagando por un sueño: una casa propia en un terreno bien ubicado. Las víctimas, que pagaron en su mayoría en dólares, pensaron que lo que adquirían era legítimo, pero la situación cambió cuando empezaron a notar irregularidades.
Cuchinelli explicó que la modalidad de la estafa se presentó en dos formas: una era la venta de lotes con la promesa de construcción de viviendas, y la otra era la construcción de casas en terrenos ya adquiridos por los clientes. Los engaños fueron tan bien elaborados que los compradores recibieron renders y documentos falsos que mostraban cómo serían sus futuras casas. La sensación de tener todo resuelto los hizo sentirse seguros, pero lo que inicialmente parecía ser una oportunidad única se transformó en una pesadilla.
Hasta el momento, los daños estimados ascienden a un monto cercano a los 3 millones de dólares. Cada uno de los damnificados pagó entre 60.000 a 100.000 dólares, un total que alcanza aproximadamente los 3 millones y medio de dólares. Algunos de ellos llegaron a pagar el 100% del valor de la propiedad, pero nunca recibieron ni los terrenos ni las viviendas prometidas.
El descubrimiento de la estafa comenzó a principios de 2024, cuando los afectados notaron inconsistencias en la documentación y en la sede de la empresa que gestionaba las ventas. Los pagos eran realizados a nombres de diferentes de la empresa, y los recibos no coincidían con las facturas originales. A partir de allí, los damnificados comenzaron a denunciar públicamente el fraude.
Las investigaciones apuntan a una pareja y a un tercero como los principales responsables. Según Cuchinelli, el matrimonio involucrado no tiene antecedentes previos en el sector inmobiliario y no parece tener vínculo con la zona, mientras que el tercero, que aparece como el gerente de la empresa, es de Cipolletti. Las autoridades han formulado cargos por defraudación, y la justicia ya ha impuesto medidas cautelares para los imputados, como la prohibición de salida del país y la obligación de firmar en la comisaría.
El abogado también mencionó que los afectados están buscando recuperar lo invertido, aunque algunos ya han dado por perdido el dinero y exigen que se continúe con el proceso penal para que los responsables enfrenten las consecuencias. Los damnificados confían en que la justicia tomará medidas más severas, especialmente ante la aparición de un hotel en Villa La Angostura, que podría haber sido edificado con los fondos de las víctimas.
Este caso ha generado gran alarma en la comunidad, especialmente por el nivel de organización y la cantidad de personas involucradas en la estafa. Además, las autoridades de Villa La Angostura están bajo la lupa por no haber detectado antes el origen sospechoso de los fondos utilizados en la construcción del hotel, lo que ha generado un debate sobre la falta de controles en el sector inmobiliario.
El abogado Cuchinelli hizo un llamado de advertencia a la ciudadanía para que siempre verifique la antigüedad y credibilidad de las empresas que ofrecen viviendas y terrenos. “Cuando algo parece demasiado fácil, hay que ser cauteloso. En este caso, las promesas eran tan atractivas que muchos no dudaron en involucrarse”, dijo.