Este lunes, los trabajadores municipales percibirán sus haberes con un incremento del 8,53%, correspondiente a la actualización por el Índice de Precios al Consumidor (IPC). La suba alcanza a todas las categorías, incluyendo empleados de planta permanente, contratados, jubilados y personal político.

El secretario de Finanzas, Recursos y Protección Ciudadana, Fernando Schpoliansky, detalló que este aumento corresponde a la recomposición salarial pactada, abarcando los meses de diciembre, enero y febrero. Con este ajuste, se cierra la paritaria anterior, que acompasó la inflación registrada en el período.

Schpoliansky destacó que el pago de salarios se realizará con recursos propios y sin asistencia financiera externa. Subrayó que esta política fiscal permite afrontar los compromisos salariales sin recurrir a endeudamiento ni retrasos en la liquidación.

En cuanto a futuras actualizaciones, el funcionario informó que se reanudaron las negociaciones con el gremio Si.Tra.Mu.Ne para establecer un nuevo acuerdo. Se prevé que el próximo convenio contemple una pauta anual que brinde previsibilidad a los trabajadores.

«Seguramente en los próximos días habrá anuncios sobre los nuevos aumentos salariales», anticipó Schpoliansky, quien aseguró que el diálogo con el sindicato es fluido y positivo. Según indicó, el objetivo es garantizar la continuidad del esquema de ajuste según la inflación.

Por otro lado, el secretario remarcó que la intención del municipio es seguir aplicando incrementos atados al IPC, aunque resta definir la metodología de implementación. Este sistema busca evitar el deterioro del poder adquisitivo de los empleados municipales.

Desde el gremio de municipales, esperan que las nuevas negociaciones contemplen una revisión periódica de los haberes, para evitar desfasajes frente a la escalada inflacionaria. El objetivo es alcanzar un acuerdo que proteja los ingresos del sector.

El municipio ratificó su compromiso de mantener el equilibrio financiero y garantizar el cumplimiento de los aumentos acordados, asegurando que los sueldos continúen en línea con la evolución del costo de vida.