El temporal de granizo que azotó este domingo por la tarde a distintas localidades del Alto Valle, entre ellas Fernández Oro, Cipolletti y Allen, provocó graves daños en la producción frutícola, dejando a numerosos productores al borde de la quiebra. Desde la Cámara de Productores Agrícolas de Fernández Oro, su representante Carlos Zanardi confirmó que se trata de “uno de los golpes más duros de los últimos años” y pidió a los damnificados presentar la declaración de daños en la sede de la entidad para iniciar el relevamiento.
“Algunos productores anoche lloraban, porque en la situación económica actual, con la rentabilidad por el suelo y los costos por las nubes, una pérdida así destruye toda posibilidad de llegar a la próxima cosecha”, expresó Zanardi en diálogo con Radio 7.
El dirigente explicó que el impacto del granizo afectó peras, manzanas, frutas de carozo y cerezas, en un momento clave del ciclo productivo, cuando los cultivos ya se encontraban en fase de crecimiento. “Una granizada en esta etapa del año te puede arruinar hasta el 80% de la producción, y el resto que se salva necesita un trabajo de raleo manual costosísimo”, detalló.
Zanardi también subrayó que los precios que recibe hoy el productor por la fruta exportada son “insostenibles”. “Estamos cobrando apenas 250 pesos por kilo exportado, cuando el costo de producción supera los 350 centavos de dólar. Es una actividad en rojo que sobrevive a fuerza de endeudamiento y esperanza”, añadió.
La crisis productiva se mezcló con la indignación política que generó un video viral de la diputada nacional y senadora electa Lorena Villaverde (La Libertad Avanza), quien en redes sociales celebró la caída del granizo minutos después del temporal.
“Fue vergonzoso y ofensivo, no solo para los productores sino para toda la provincia. Festejar una granizada en el Alto Valle es desconocer la geografía, la economía y el sufrimiento de miles de familias que viven de la fruta”, criticó Zanardi.
El referente frutícola afirmó que el video “demuestra una total falta de empatía y de comprensión de lo que significa esta actividad para Río Negro”. La publicación de Villaverde fue eliminada horas después, pero las reacciones de enojo continúan multiplicándose entre los trabajadores rurales y las cámaras productoras.
La fruticultura rionegrina, uno de los motores económicos de la región, atraviesa una crisis estructural agravada por los efectos climáticos. A la sequía y las heladas tardías se suma ahora este nuevo temporal, que golpea especialmente a los pequeños y medianos chacareros.
“Estamos en el borde del abismo”, resumió Zanardi. “Cada tormenta deja a más familias fuera del sistema productivo. Necesitamos que las autoridades implementen un plan urgente de asistencia y reconstrucción para que la fruticultura del Alto Valle no desaparezca”.


