
En lo que va de 2025, Neuquén registra 26 fallecidos por siniestros viales, marcando un preocupante aumento de dos víctimas más que en el mismo período de 2024, según datos oficiales. Este 10 de junio, en el Día Nacional de la Seguridad Vial, las autoridades alertan sobre la creciente siniestralidad en la provincia, que pone en jaque las políticas de prevención y control.
Durante el primer cuatrimestre de 2025, se produjeron 1.304 siniestros viales en Neuquén, reflejando un incremento en la accidentología comparado con años anteriores. Las estadísticas, recopiladas por el Observatorio Vial de la provincia, muestran que las rutas más peligrosas, como la 7, 22, 40 y 237, concentran la mayor cantidad de incidentes graves debido a su alta circulación, obras en curso y problemas de visibilidad.
La Ruta 7, conocida como la «Ruta del Petróleo» hacia Vaca Muerta, se destaca como el epicentro de los accidentes fatales. La combinación de camiones de gran porte, vehículos de turismo y trabajadores de la industria hidrocarburífera genera un tráfico intenso en un corredor con infraestructura deficiente y señalización inadecuada, según advierten especialistas.
El aumento de la siniestralidad, con un 25% más de víctimas fatales en comparación con 2023, según la ONG Bien Argentino, enciende alarmas sobre la falta de controles efectivos y la imprudencia al volante. Factores como el consumo de alcohol, el uso de celulares y los sobrepasos indebidos son señalados como las principales causas de estas tragedias.
En el Día Nacional de la Seguridad Vial, se intensifican los pedidos de acción. Organizaciones sociales y expertos exigen mayor educación vial, sanciones más severas y mejoras en la infraestructura. Sandra Torres, presidenta de Bien Argentino, subrayó que la conciencia ciudadana y la articulación entre Estado, municipios y sector privado son clave para revertir esta tendencia.
El gobierno provincial trabaja en un plan de acción para Vaca Muerta, anunciado recientemente, que busca limitar el tránsito pesado en rutas críticas y financiar obras con aportes de la industria petrolera. Sin embargo, la falta de presupuesto nacional para mantenimiento de rutas, como la 22 y 40, agrava el problema, según denuncian desde el sector.
En 2024, Neuquén registró 64 muertes viales, un 13% más que en 2023, lo que evidencia una tendencia al alza que persiste en 2025. Aunque en la capital provincial se redujo el número de víctimas fatales de 12 a 8 el año pasado, las rutas siguen siendo cinco veces más letales que las zonas urbanas, según la Secretaría de Emergencia.
La educación vial emerge como un pilar fundamental para la prevención. Campañas en escuelas y controles de alcoholemia se han implementado, pero expertos insisten en que sin una cultura de respeto a las normas y sanciones efectivas, los números seguirán creciendo. La sociedad neuquina enfrenta el desafío de transformar esta realidad para salvar vidas.