La reciente condena judicial a Cristina Fernández de Kirchner por la causa Vialidad encendió un debate político a nivel nacional sobre el futuro del kirchnerismo, el liderazgo dentro del peronismo y el impacto institucional del fallo. En diálogo con Radio 7, el analista y periodista de la Agencia Noticias Argentinas, Gonzalo Delmonte consideró que la expresidenta “no sale fortalecida” de esta situación y comparó su desenlace con el de Carlos Menem, que también fue condenado pero logró eludir consecuencias políticas por años.

“Una condena de este tenor es una mancha a una carrera política que nadie discute, pero que quedará marcada para siempre”, expresó Delmonte.

La Corte Suprema rechazó el recurso extraordinario presentado por la defensa de Fernández de Kirchner y, en consecuencia, quedó firme la sentencia que la inhabilita de por vida para ejercer cargos públicos, salvo que sea indultada.

El juez federal Rodrigo Giménez Uriburu ya notificó a la Dirección Nacional de Migraciones, al Ministerio de Seguridad, a la Cámara Nacional Electoral y a otros organismos, dejando formalmente asentado que la exmandataria debe presentarse antes del 20 de junio ante el Tribunal Oral Federal para que se defina su situación procesal. Se evalúa la posibilidad de otorgarle prisión domiciliaria en su departamento de la calle San José, en la Ciudad de Buenos Aires.

Desde el análisis político, Delmonte planteó interrogantes claves: ¿Cristina queda debilitada o se reactiva como mártir? ¿Qué rol asumirá Axel Kicillof frente a este escenario? También señaló que dentro del peronismo hay una pugna latente por la conducción y que “hoy nadie se anima a sentarse en la mesa del PJ porque el costo político es altísimo”.

“Lo peor que te puede pasar hoy en el interior es que te asocien con Cristina Kirchner”, disparó, en referencia al desgaste de imagen que tiene el kirchnerismo fuera del AMBA.

Además, describió el panorama del PJ como una “práctica disolución” del partido, donde ningún gobernador se mostró en la mesa nacional del peronismo reunida esta semana.

En ese marco, la figura de Máximo Kirchner aparece en el radar como posible candidato en la tercera sección electoral, aunque sin certezas sobre su arrastre real sin la figura central de su madre en campaña.

“El peronismo huele la sangre del poder y se acomoda, pero por ahora no hay liderazgo claro”, concluyó Delmonte.