Productores frutihortícolas del Alto Valle, provenientes de Cipolletti, Fernández Oro, Allen y otras localidades, se reúnen hoy lunes 23 de junio a las 17 horas en la sede del Consorcio de Riego, ubicada en calle San Luis, para definir medidas ante la falta de apoyo económico estatal. La convocatoria responde al creciente malestar por la crisis que atraviesa el sector, agravada por la ausencia de respuestas de los gobiernos nacional, provincial y municipal.
La reunión busca establecer un plan de acción frente al descontento con las políticas económicas que, según los productores, han dejado al sector “a la deriva”. El comunicado emitido por los organizadores señala que la fruticultura enfrenta una crisis estructural que pone en riesgo la continuidad de la actividad, principal motor económico de la región. La falta de medidas concretas de apoyo ha generado tensiones con autoridades y representantes parlamentarios.
El encuentro en el Consorcio de Riego es considerado clave para unificar criterios entre los productores y decidir posibles medidas de protesta o negociación. Fuentes cercanas al sector indicaron que se evaluarán desde tractorazos hasta pedidos formales de audiencia con el gobernador rionegrino, Alberto Weretilneck, a quien ya reclamaron intervención en diciembre pasado sin obtener soluciones definitivas.
La crisis frutícola no es nueva, pero se ha intensificado en los últimos años. Los productores denuncian que los costos de producción superan los precios de venta, como ya advertían en 2023 durante un tractorazo en la ruta 151, donde reclamaron una ley nacional frutícola para regular precios. La caída de exportaciones y el aumento de costos laborales agravan la situación, según un informe reciente de la Cámara Argentina de Fruticultores Integrados (CAFI).
Los productores critican la falta de políticas que promuevan la competitividad del sector, como subsidios, créditos accesibles o incentivos para la exportación. En 2017, el Senasa y la Cámara de Productores de Cipolletti acordaron facilitar trámites de exportación, pero estas medidas no han sido suficientes para revertir la crisis actual.
La reunión también apunta a visibilizar la importancia del sector para la economía regional. La fruticultura del Alto Valle, históricamente un pilar productivo, genera miles de empleos directos e indirectos. Sin embargo, desde la década de 1950, los pequeños y medianos productores enfrentan dificultades estructurales que han llevado a la desaparición de muchas explotaciones, según un estudio histórico de la región.
Mientras los productores buscan respuestas, el gobierno nacional avanza con medidas económicas controversiales, como los fondos de despido que reemplazarían la indemnización tradicional, generando incertidumbre en el sector laboral ligado a la fruticultura. Esta situación podría tensionar aún más las negociaciones con las autoridades.
