El crimen de Pedro Pablo Mieres, el joven neuquino de 30 años que estudiaba Biotecnología en la Universidad Nacional de La Plata (UNLP), conmociona a la comunidad educativa y aún no tiene una hipótesis clara. La Justicia investiga si fue víctima de un robo o si se trató de un ataque con otra motivación, mientras familiares y amigos exigen respuestas.

El cuerpo de Mieres fue hallado sin vida, atado, amordazado y con signos de violencia en su cabeza. La víctima no tenía ropa y yacía en el domicilio que alquilaba en calle 115 entre 46 y 47, en la zona facultativa de La Plata. Fue un compañero quien lo encontró al acercarse al lugar preocupado por su falta de respuesta a los mensajes.

El asesinato ocurrió durante la madrugada del martes, en circunstancias que aún no han sido esclarecidas. En la escena del crimen trabajó personal de la Delegación Departamental de Investigaciones (DDI), junto con la Unidad Funcional de Instrucción a cargo del fiscal Gonzalo Petit Bosnic, quien dispuso el levantamiento de rastros y otras medidas.

La familia de Pedro, oriunda de Neuquén, viajó a la ciudad bonaerense para acompañar la investigación y despedir al joven. En diálogo con Noticias 7, Luna Agustina Mieres, hermana de Pedro, lo recordó con palabras emotivas y exigió justicia: “Pablin era hermoso. Muy empático, amoroso y siempre dispuesto a ayudar, como cuando lo hizo en pandemia con la Brigada Ramona Medina”.

Pedro Mieres era secretario de Asuntos Estudiantiles en la Facultad de Ciencias Exactas de la UNLP y muy querido por sus compañeros y docentes. Su compromiso con lo social y su vocación de servicio fueron destacados por quienes lo conocieron en la vida universitaria y en su trabajo en el Hospital San Martín de La Plata.

El impacto por su asesinato se sintió fuerte entre sus allegados, que lo definieron como un joven lleno de valores, familiar, solidario y profundamente humano. “Es hijo de dos personas llenas de valores, hermano mayor de dos mujeres que lo van a necesitar siempre y tío de dos pequeñitos que lo aman”, expresó Luna.

Las autoridades de la UNLP expresaron su pesar por el crimen y exigieron el pronto esclarecimiento del caso. Organizaciones estudiantiles y sociales convocaron a una concentración para pedir justicia por Pedro y visibilizar la violencia en la que aún se encuentran inmersos muchos sectores vulnerables.

La causa, que aún se encuentra en etapa preliminar, no descarta ninguna línea de investigación y continúa reuniendo pruebas para identificar a los autores. La fiscalía aguarda los resultados de peritajes y entrevistas con allegados de Mieres que puedan arrojar pistas sobre lo sucedido en la madrugada trágica.