
Las acciones de Tesla se desplomarían en los mercados internacionales tras la sorpresiva ruptura entre Elon Musk y el presidente de los Estados Unidos, Donald Trump. La tensión política impactaría de lleno en Wall Street, donde los títulos de la automotriz eléctrica cerrarían con una caída superior al 14%, lo que significaría una pérdida bursátil cercana a los 150.000 millones de dólares.
La fractura se profundizaría luego de que el mandatario norteamericano amenazara con eliminar subsidios y contratos clave para las empresas vinculadas al magnate. En respuesta, el propio Musk lo acusaría de haber llegado a la Casa Blanca gracias a su respaldo público, según informaron medios como France 24.
La jornada del jueves 5 de junio marcaría así una de las peores caídas en la historia de la firma tecnológica. La cotización de Tesla volvería a perforar el umbral del billón de dólares en capitalización, en medio de un escenario dominado por presiones políticas, boicots ciudadanos y caídas sostenidas en las ventas internacionales.
Además, el desplome bursátil de esta semana se sumaría a un retroceso acumulado de casi 30% en lo que va del año, potenciado por el rechazo social hacia las empresas del empresario nacido en Sudáfrica. Parte del malestar surgiría por su desempeño en el Departamento de Eficiencia (DOGE), un órgano gubernamental bajo escrutinio público.
Desde el entorno financiero advierten que la situación aún podría empeorar si la administración republicana avanza con la quita de beneficios fiscales. En paralelo, las operaciones en Europa revelarían una caída abrupta en la demanda de sus modelos eléctricos, lo que acentuaría la crisis estructural de la marca.