
En un procedimiento conjunto realizado este miércoles al mediodía, el Ministerio de Seguridad de Neuquén, la Policía provincial y la Municipalidad de Neuquén intervinieron en una actividad no habilitada que se desarrollaba en la comisión vecinal del barrio Cuenca XV, donde una empresa internacional realizaba escaneos de iris a cambio de criptoactivos o dinero en efectivo.
La operación fue encabezada por el Departamento de Delitos Económicos, a partir de una denuncia ciudadana que alertó sobre la presencia de la empresa Worldcoin, que ya había sido cuestionada por prácticas similares en Chile, España y también en la localidad de Zapala, donde existe una causa judicial abierta.
“Detectamos que se ofrecían entre 10.000 y 15.000 pesos en criptoactivos a vecinos que accedieran al escaneo de su iris”, explicó el comisario Gerardo Sanzana, jefe de Delitos Económicos.
Según detalló, se utilizaba un dispositivo llamado Orb, una esfera metálica que capta los datos biométricos para crear una identidad digital única.
El responsable de la actividad, un joven de aproximadamente 27 años, presentó una habilitación comercial municipal que solo lo autorizaba para tareas publicitarias, sin incluir la recolección de datos biométricos. Por este motivo, se dio intervención inmediata al área de Comercio, que suspendió la actividad y labró un acta por incumplimiento.
“La habilitación presentada no ampara este tipo de procedimiento. Se deberá regularizar administrativamente”, indicó la directora general de Control e Inspecciones de la Municipalidad, presente en el operativo.
El fiscal de Delitos Económicos, Juan Manuel Narváez, intervino en el lugar y ordenó el secuestro del dispositivo ORB y otros elementos tecnológicos, además de la demora preventiva del individuo para su identificación y la averiguación de antecedentes.
“El reconocimiento de iris se utiliza para asegurar operaciones con criptoactivos, pero la obtención masiva de estos datos sensibles sin control estatal plantea serias dudas sobre su uso y resguardo” agregó Sanzana.
El operativo refuerza los controles sobre actividades relacionadas con criptoactivos y datos biométricos, en un contexto de creciente preocupación por la recolección no regulada de información personal sensible en la región.