
Neuquén planifica un simulacro masivo para enfrentar posibles inundaciones, coordinado por la Secretaría de Emergencias y Gestión de Riesgo tras la tragedia climática en Bahía Blanca, según informó el gobierno provincial. La iniciativa, que se desarrollará en la región Confluencia, busca fortalecer la respuesta ante emergencias hídricas en zonas vulnerables de la cuenca de los ríos Limay y Neuquén.
La Secretaría de Emergencias lidera la organización, articulando con la Autoridad Interjurisdiccional de Cuencas (AIC), municipios, Defensa Civil, bomberos y Cruz Roja. El ejercicio simulará escenarios de crecida de ríos y desborde, con el objetivo de evaluar protocolos, tiempos de evacuación y coordinación entre organismos, priorizando la seguridad de la población.
La región Confluencia es la zona crítica, identificada por su alta exposición a riesgos hidrometeorológicos debido a la confluencia de los ríos Limay y Neuquén. La Mesa Regional de Prevención, reunida en marzo de 2025, destacó la necesidad de señalizar vías de escape y difundir alertas hidrológicas para preparar a las comunidades ribereñas.
El simulacro incluirá una simulación de mesa previa, donde se discutirán roles, responsabilidades y brechas en los protocolos, según fuentes de la Secretaría. Esta etapa, clave para afinar la planificación, se complementará con un ejercicio práctico que movilizará a brigadas de emergencia y simulará evacuaciones en barrios de riesgo.
La capacitación de equipos de élite en rescate acuático, iniciada en abril de 2025, será un pilar del simulacro, con especialistas formados en aguas rápidas y medicina táctica. Estas brigadas, entrenadas en el Club de Camioneros, estarán preparadas para actuar en condiciones extremas, como crecidas o desbordes.
La población será involucrada mediante campañas educativas, con videos institucionales de la AIC y folletería sobre vías de evacuación, siguiendo el modelo de la Ley 5144 de 2017. Estas acciones buscan que los vecinos reconozcan señales de escape y sepan cómo actuar ante una emergencia hídrica.
El simulacro responde a recientes emergencias hídricas, como las inundaciones de junio de 2023 que afectaron a más de 650 familias en Chos Malal, Vista Alegre y Centenario. La declaración de emergencia hídrica ese año subrayó la urgencia de mejorar la preparación ante eventos climáticos extremos.
La coordinación interinstitucional es el mayor desafío, según especialistas de la AIC, quienes advierten que la falta de práctica conjunta puede retrasar respuestas reales. El simulacro, aún sin fecha confirmada, será un paso clave para fortalecer la resiliencia de Neuquén frente al cambio climático y el crecimiento urbano en zonas de riesgo.