
Los baches y las roturas en diversas calles de Neuquén continúan siendo un problema que afecta a los vecinos y conductores de la ciudad. A lo largo de sectores clave como Necochea y Novella, y en la intersección de Cayastá con Avenida del Trabajador, los daños en las vías son notorios y se agravan con el paso del tiempo. Los residentes de estas zonas han manifestado su preocupación por la falta de reparaciones y la progresiva expansión de los baches, que afectan tanto la seguridad vial como la comodidad de los habitantes.
En particular, el caso de la esquina de Necochea y Novella alertó en la necesidad de un permanente trabajo de reparación de parte del municipio. Según los informes de los vecinos, el agua proveniente de fugas domiciliarias y públicas contribuye a la descomposición del asfalto, creando pequeños parches que rápidamente ceden ante la presión del líquido.
El problema de los baches no es exclusivo de una zona, sino que se extiende por varios puntos de la ciudad. La Avenida del Trabajador es otro de los lugares donde se pueden ver numerosos huecos en el asfalto, que aumentan de tamaño con el paso de los días. En áreas como la rotonda (Gregorio Álvarez) en la intersección de calle República de Italia, un cráter se agranda constantemente, generando inconvenientes tanto a los vehículos como a los peatones.
El viernes pasado, el móvil de Radio 7 recorrió las calles afectadas y documentó las condiciones de la vía en la intersección de Cayastá y Avenida del Trabajador. A pesar de que los daños en estos puntos no siempre son de gran magnitud, las fugas, aunque pequeñas, generan un desgaste progresivo que a largo plazo produce un daño considerable. Asimismo, otra de las grietas que demanda reparación se encuentra en la intersección de calle Chrestia y República de Italia. Los conductores y peatones se ven obligados a adaptarse a estas condiciones, a menudo sin una solución inmediata.
Las pequeñas fugas que pasan desapercibidas al principio se convierten en grandes problemas con el tiempo. Aunque las autoridades podrían haber abordado estas situaciones de manera preventiva, la falta de acción ha permitido que el daño se acumule. Los vecinos de varias zonas de la ciudad informan que la situación no solo afecta la circulación, sino también el estado general de las calles, que parece estar empeorando sin que se realicen reparaciones efectivas.
El caso de la intersección de Metrobus también se destaca por la cantidad de pozos y otros problemas en el asfalto. Uno de los baches más antiguos, ubicado entre Moritán y Rufino Ortega, sobre Avenida del Trabajador, se ha convertido en un cráter histórico que afecta gravemente el tránsito. Además de los baches, la falta de adecuación de las bocas de inspección de cloacas ha empeorado la situación, creando un obstáculo adicional para los conductores.
En esa misma zona, las bocas de inspección de cloacas se encuentran profundamente hundidas, lo que obliga a los vehículos a evitar las zonas afectadas. Este inconveniente, que podría resolverse con una reparación sencilla, ha sido ignorado durante años, agravando las condiciones de circulación y generando molestias a los conductores. La falta de mantenimiento en estos puntos ha generado un descontento generalizado entre los vecinos.
La situación es especialmente crítica en áreas de alto tránsito como la Avenida del Trabajador, donde los conductores deben lidiar con baches, pozos y otras irregularidades en la vía. La situación pone de manifiesto la necesidad de continuar elaborando trabajos de planificación que garanticen el buen estado de las avenidas y calles de máxima circulación en la ciudad.