
El municipio de Cipolletti, junto a la Policía de Río Negro, llevó a cabo la demolición de un «aguantadero» ubicado en la calle Celedonio Flores, del barrio 1200 viviendas.
La acción, que responde a denuncias vecinales recibidas a través de la Central de Emergencias 109, busca eliminar espacios que sirven de refugio para delincuentes.
El intendente Rodrigo Buteler, afirmó que «activamos la demolición de más de diez aguantaderos ubicados en pleno ámbito urbano. Espacios abandonados que se convierten en refugio de delincuentes, desde donde realizan ‘inteligencia’ de los movimientos de los vecinos, o dejan elementos de sus robos para pasarlos a buscar después».
Entre las demoliciones más recientes, resaltan las de los «aguantaderos» ubicados en la calle Perito Moreno, barrio Alaniz, y en la rotonda de la ruta 22 y Pacheco. Asimismo, se desmantelaron galpones abandonados en la zona ferroviaria, los cuales serán transformados en un nuevo espacio verde.
«Esa es la convicción con la que llevamos adelante esta política. La seguridad es para nosotros una prioridad; queremos garantizar a las cipoleñas y los cipoleños que puedan caminar tranquilos y vamos a trabajar en consecuencia», concluyó Buteler.