
El incendio en el Valle Magdalena, dentro del Parque Nacional Lanín, sigue activo y ha afectado hasta el momento aproximadamente 15.200 hectáreas. Así lo reportó el Comando Unificado que opera desde la Estancia Mamuil Malal, integrado por personal del Parque Nacional Lanín y del Gobierno de la Provincia de Neuquén.
A pesar de los esfuerzos por controlar el fuego, el área sigue ampliándose y se espera que el perímetro de la zona afectada aumente aún más en las próximas horas. El informe técnico está siendo evaluado por las autoridades competentes para confirmar la extensión exacta del daño.
Las condiciones meteorológicas complican la lucha contra el fuego, con pronósticos que indican vientos del oeste por la tarde y ráfagas fuertes. Esta inestabilidad atmosférica contribuye a la formación de columnas convectivas, que intensifican el incendio y dificultan las tareas de los brigadistas.
Para afrontar esta situación, se ha diseñado una estrategia especial que incluye el uso de motobombas, herramientas manuales y medios aéreos. Los equipos trabajan intensamente en las zonas de Cola y Cabeza, donde se están estableciendo líneas de encadenamiento de agua para controlar el avance del fuego.
El fuego ha sido especialmente difícil de contener debido a la topografía accidentada del terreno y las condiciones climáticas adversas, que favorecen la propagación rápida de las llamas. Las autoridades han señalado que estos factores aumentan considerablemente los riesgos para los brigadistas y para la población de las zonas cercanas.
Además, el parque se encuentra en una de las áreas más biodiversas del país, lo que hace que el impacto ambiental de este incendio sea sumamente preocupante. La fauna local y la vegetación autóctona se ven severamente amenazadas por el avance de las llamas.
En paralelo, el Gobierno de Neuquén ha solicitado el apoyo de equipos especializados de otras provincias y ha activado protocolos de emergencia para asistir a las comunidades cercanas en caso de que el incendio se descontrole. Las autoridades también trabajan en la evacuación preventiva de algunos sectores de la región.
A medida que avanzan las labores para sofocar el incendio, las autoridades reiteran el llamado a la población a evitar acercarse a la zona afectada para no entorpecer el trabajo de los brigadistas y garantizar la seguridad de todos los involucrados en el operativo.
El futuro de la situación dependerá de la evolución de las condiciones climáticas en las próximas horas, especialmente de los vientos y de la posibilidad de nuevas ráfagas. Los esfuerzos continúan con el objetivo de minimizar el daño al medio ambiente y a las comunidades cercanas.