Durante su discurso, Milei y otros funcionarios de su gobierno, como los ministros Luis Caputo (Economía) y Patricia Bullrich (Seguridad), se dedicaron a exponer cómo un líder de derecha debe desempeñarse políticamente para tener éxito. Según fuentes cercanas al presidente, se trató de una reflexión sobre la acción política necesaria para hacer frente a los desafíos actuales, destacando las diferencias con las políticas de izquierda y progresistas.
El mandatario aprovechó su intervención para reiterar su postura en contra de la Agenda 2030 y el socialismo, señalando que dichos programas “dejan a los países en el fondo del mar”. En este sentido, destacó que los modelos promovidos por la izquierda global solo han llevado al fracaso a varias naciones, citando el ejemplo de Argentina antes de su gobierno. Este enfoque, ya utilizado por Milei en otros foros internacionales como el G20 y la Asamblea General de la ONU, tiene como fin exponer los peligros del globalismo.
Milei también se refirió a la relación con Estados Unidos y a la necesidad de fortalecerla, en particular a través de un tratado de libre comercio. Esta ha sido una de las prioridades del presidente desde su asunción, inspirada en parte por el mandato de Donald Trump, quien también estuvo vinculado a la CPAC en años anteriores. La relación con el país norteamericano fue presentada como clave para recuperar la soberanía económica de Argentina.
El presidente de la Nación utilizó la cumbre para también marcar un contraste con las políticas implementadas en gobiernos de izquierda, tanto en Argentina como en el resto del mundo. Según funcionarios de La Libertad Avanza, la conferencia sirvió para dejar claro que la batalla cultural está siendo librada por quienes rechazan las ideas progresistas, como la Agenda 2030 y las políticas que, según Milei, atentan contra la libertad económica.
Este evento marca un hito en la agenda política de Argentina, al colocarla en el centro de los debates internacionales sobre liberalismo y conservadurismo. La presencia de líderes de derecha mundialmente reconocidos, junto con el discurso firme de Milei, muestra el rumbo político que busca imprimir el presidente para el país. La conferencia se celebró en el Hotel Hilton de Puerto Madero, un lugar emblemático que simboliza el deseo del presidente de proyectar a Argentina en el contexto internacional.
Además de los discursos de los funcionarios, la CPAC dejó claro que el gobierno de Milei no solo se enfrenta a desafíos económicos, sino también a una batalla ideológica que busca transformar la agenda progresista en una oportunidad para el crecimiento de los países que opten por el camino liberal-conservador.
La CPAC también reforzó el mensaje de que el gobierno argentino está dispuesto a fortalecer su vínculo con las principales potencias del mundo, especialmente Estados Unidos, mientras sigue luchando contra lo que considera una agenda socialista que ha marcado negativamente la historia de Argentina en las últimas décadas.