
Trabajadores del sector nuclear expresaron su preocupación ante una posible privatización de NASA (Nucleoeléctrica Argentina Sociedad Anónima) y el freno a proyectos clave en la Comisión Nacional de Energía Atómica (CNEA), por parte del Gobierno Nacional.
«Esperábamos esta noticia desde que se sancionó la Ley Bases. Hace un año y medio que estamos discutiendo qué hacer con esto», señaló Carolina Komar, trabajadora de la CNEA, en Radio 7.
Según Carolina, la privatización de NASA «no tiene sentido, ya que es una empresa superavitaria». «NASA, que es la empresa que opera en las centrales, es una empresa superavitaria. Esto quiere decir que genera plata y no es deficitaria como dice el Gobierno, con lo cual ¿por qué venderíamos una empresa que genera plata?», cuestionó.
«La situación en la que estamos todos los trabajadores es bajo ataque», afirmó.
A su vez, dijo que la falta de presupuesto está afectando el desarrollo de proyectos clave en la CNEA, como el reactor CAREM. «La Comisión Nacional de Energía Atómica tenía dos proyectos grandes y todo quedó frenado», lamentó Carolina.
Además, indico que esta paralización de proyectos y la fuga de cerebros ponen en riesgo la soberanía tecnológica del país. «Estamos perdiendo muchísimos compañeros que se van a trabajar a las empresas canadienses o estadounidenses… Y lo terrible de esto es que te corta la soberanía y la autonomía tecnológica», explicó Carolina.
Ante esta situación, los trabajadores del sector nuclear se encuentran en estado de alerta y denuncian la falta de políticas que impulsen el desarrollo de la energía nuclear en Argentina. «Nosotros estamos haciendo la denuncia y contandole a todo el mundo lo importante que es poder contar con reactores nucleares», concluyó Carolina.