
El sistema universitario argentino consiguió una victoria clave en el Senado: con casi un 85% de los votos, la Cámara alta rechazó el veto del presidente Javier Milei a la ley que garantizaba un refuerzo presupuestario para las universidades nacionales y el Hospital Garrahan.
El vicerrector de la UNCo, Paul Osovnikar, aseguró que la votación era lo que se esperaba tras semanas de incertidumbre y reuniones con senadores en Buenos Aires. “Las universidades necesitaban recomposición presupuestaria. Lo que acompañó al Senado fue el reclamo de toda la sociedad, no solo de la comunidad universitaria”, afirmó.
Osovnikar subrayó que las seis bancas de Río Negro y Neuquén acompañaron el rechazo al veto, consolidando un frente regional en defensa de la educación pública. Según explicó, la movilización social y el antecedente de la ley aprobada en 2023 fueron determinantes para inclinar la balanza en favor del sistema educativo.
El vicerrector también advirtió sobre posibles reacciones del Ejecutivo nacional, que en los últimos meses impulsó auditorías y cuestionamientos públicos contra las universidades. “Tenemos auditorías internas y externas, la AGN planifica y no hay problema con eso. Lo que no aceptamos es el desprestigio”, señaló.
Consultado sobre la situación actual de la Universidad del Comahue, Osovnikar reconoció que el funcionamiento está garantizado principalmente gracias a recursos propios y apoyos provinciales y municipales, aunque persisten graves dificultades salariales. “Hay renuncias, baja dedicación y docentes que toman licencias sin goce para trabajar en otros lugares”, explicó.
De todos modos, la expectativa está puesta en que el gobierno promulgue la ley en los próximos 10 días hábiles y que los fondos comiencen a implementarse lo antes posible. “Esperamos que hacia el 20 de octubre ya esté promulgada la norma y podamos cerrar el año con el presupuesto que corresponde”, concluyó.