
El robo de un auto en pleno centro de Neuquén, con tres perros en el interior, generó una fuerte conmoción entre vecinos y en redes sociales. El hecho ocurrió el pasado 8 de septiembre en calle San Luis, cuando la propietaria estacionó momentáneamente su Volkswagen Fox rojo, lo dejó en marcha para cerrar el portón y en ese instante un desconocido se subió y escapó a gran velocidad.
La dueña difundió de inmediato la foto del rodado y de sus mascotas, lo que permitió que rápidamente se recuperaran los perros, aunque uno de ellos sufrió una lesión en una pata tras ser atropellado por un vehículo que no se detuvo. El comisario Víctor Melgarejo, del Departamento de Automotores, confirmó que el auto apareció en buen estado en la intersección de Avenida del Trabajador y Raciodo, en la zona oeste. Solo presentaba un raspón en la puerta del conductor.
El operativo se realizó a partir del seguimiento de cámaras de seguridad y aportes de testigos. En el interior del vehículo, los investigadores hallaron un inhibidor de señal y un par de anteojos, elementos que quedaron secuestrados como prueba. La fiscal de la causa, María Soledad Rangone, dispuso la entrega del rodado a la damnificada una vez concluidas las pericias.
El caso tuvo un giro inesperado cuando la familia recibió un llamado de un número privado. Un hombre les exigió 150 mil pesos de rescate, bajo la promesa de devolverles a los animales. En la desesperación, llegaron a transferir 100 mil pesos, pero luego advirtieron que se trataba de una estafa, ya que el supuesto interlocutor no tenía a los perros.
Melgarejo advirtió que este tipo de delitos se repite en la ciudad, generalmente cuando los autos quedan en marcha o con objetos de valor a la vista. “La recomendación es no dejar el motor encendido ni llaves de repuesto en el interior, porque esto facilita el robo”, señaló.
Aunque el vehículo fue recuperado y los perros regresaron a su hogar, el episodio expuso dos problemáticas en simultáneo: la inseguridad urbana y la acción de oportunistas que, a través de redes sociales, intentan lucrar con el dolor de las víctimas. La investigación continúa para identificar a los responsables del robo.