
La justicia de Neuquén convocó para este viernes la primera audiencia de control de investigación en el marco de la causa Alison, donde se analiza una denuncia por presunta mala praxis médica en la clínica San Lucas. El encuentro busca avanzar en la recolección de pruebas y definir eventuales responsabilidades en torno al caso.
El procedimiento judicial se llevará a cabo a partir de las 12 horas en el edificio ubicado en Leloir y Entre Ríos, en las salas de audiencia penal. Se espera la participación de las partes involucradas y de los representantes de la querella, que impulsan el proceso de investigación.
Según precisó el abogado de la querella, Mariano Mansilla, en la audiencia se debatirá sobre las medidas de prueba a implementar, fundamentales para reconstruir lo ocurrido durante la intervención quirúrgica y determinar si existió negligencia médica por parte del personal de la clínica privada.
El caso se centra en Alison Calfunao, una joven madre de 30 años, quien ingresó en junio de 2025 a la clínica San Lucas para realizarse una cirugía de ligadura de trompas. Lo que debía ser un procedimiento habitual terminó en una grave emergencia médica con consecuencias irreversibles.
Durante la intervención, Alison sufrió dos paros cardíacos y debió ser trasladada de urgencia a Buenos Aires, donde recibió un trasplante de corazón y la amputación de una pierna. Estos hechos generaron un profundo impacto social y abrieron el debate sobre la calidad de la atención médica en el sector privado.
La situación motivó a la familia y a organizaciones sociales a exigir respuestas judiciales y políticas, reclamando mayor control en los procedimientos médicos y en la supervisión de las clínicas privadas que realizan cirugías de alta sensibilidad.
Actualmente, Alison continúa en proceso de recuperación en una clínica de la ciudad de Buenos Aires, donde recibe atención médica permanente. Su estado es monitoreado por equipos especializados que buscan estabilizarla tras las graves complicaciones sufridas.
Con esta audiencia, la justicia neuquina abre una etapa clave para determinar las responsabilidades y avanzar en un proceso que podría derivar en sanciones legales, además de sentar un precedente sobre la importancia de la seguridad y el respeto a los derechos de los pacientes.