Las provincias de Río Negro, Neuquén y Chubut presentaron de manera conjunta una iniciativa histórica para fortalecer la prevención y respuesta frente a incendios forestales y rurales, uno de los problemas ambientales más críticos de la región.
Un sistema integral con innovación tecnológica
El proyecto busca implementar un sistema de comunicación, detección, alerta temprana y monitoreo que permita anticipar riesgos y reducir los impactos de los incendios en áreas críticas. El plan incluye la optimización de la gestión territorial, el manejo de combustibles vegetales, mayor disponibilidad de agua en emergencias y la incorporación de soluciones tecnológicas de última generación, con el acompañamiento de INVAP S.E., referente patagónico en innovación científica.
Los incendios forestales han sido en los últimos años una de las principales causas de degradación de los bosques nativos, provocando consecuencias ambientales irreversibles, pérdidas productivas, daños en infraestructura y efectos directos sobre comunidades locales.
Cooperación interprovincial
La cooperación entre provincias aparece como una herramienta indispensable frente a los desafíos del cambio climático. La coordinación de recursos humanos, institucionales y tecnológicos permitirá contar con un sistema más eficaz de prevención y respuesta, adaptado a la creciente frecuencia e intensidad de los desastres ambientales.
El acuerdo fue suscripto por Juan José Rivera, secretario de Ambiente y Control de Desarrollo Sustentable de Chubut; Santiago Nogueira, secretario de Ambiente y Recursos Naturales de Neuquén; Judith Jiménez, secretaria de Ambiente y Cambio Climático de Río Negro; y Claudia Contreras, subsecretaria de Recursos Forestales de Río Negro.
Un hito en la gestión ambiental patagónica
La presentación del proyecto ante el Fondo de Adaptación al Cambio Climático constituye un paso clave hacia la adaptación, resiliencia y reducción de riesgos en la Patagonia. Se trata de un trabajo articulado entre tres provincias que comparten los mismos ecosistemas, donde los incendios forestales representan una amenaza recurrente y devastadora.
Con esta iniciativa, la región da un ejemplo de unidad y planificación estratégica, mostrando que la defensa del ambiente y de las comunidades requiere políticas públicas conjuntas y sostenidas en el tiempo.
