
La Policía del Neuquén y Guardafauna llevaron a cabo un operativo que culminó con el secuestro de 25 truchas y herramientas de pesca ilegal desde el embalse Alicurá hasta la confluencia del río Traful, en San Martín de los Andes. Durante el patrullaje preventivo, conformado por la División Brigada Rural y Abigeato Zona Sur junto a la Delegación Guardafauna local, se labraron seis actas contravencionales conforme a la Ley Provincial 2539.
El operativo se realizó entre la tarde del jueves y la madrugada del viernes, abarcando zonas de alto tránsito turístico y recreativo como Malahuaca. En ese contexto, fueron retenidos “14 tarros con sus respectivas líneas” de pesca junto con los ejemplares de truchas, todos incautados por incumplir las normativas provinciales que regulan la pesca deportiva.
La Ley Provincial 2539 establece procedimientos sanitarios, límites de captura y licencias obligatorias, y permite la imposición de sanciones a quienes pescan fuera de esos parámetros, especialmente durante épocas de alta circulación de pescadores. Este control es parte de una política activa de conservación del recurso ictícola en la región sur.
La presencia de personal policial especializado y guardafauna refleja la intención de prevenir la pesca furtiva en zonas naturales protegidas, y apunta a disuadir a quienes infringen la ley. El secuestro del equipamiento y de los peces incautados fue trasladado a la sede local de Guardafauna para su evaluación y disposición final.
Este control es consistente con otros operativos previos en la zona, como el realizado en julio, donde se decomisaron 27 truchas y se labraron 12 actas por pesca nocturna, exceso de capturas y uso de carnada prohibida en Piedra del Águila y Alicurá. Tales acciones muestran un esfuerzo sostenido por preservar el patrimonio natural provincial.
Además, operativos similares habían dado como resultado el secuestro de ejemplares en otros puntos de la provincia, como Villa Traful y Piedra del Águila, reflejando una estrategia de fiscalización constante y coordinada entre los organismos de fauna y las fuerzas de seguridad.
Las seis actas contravencionales labradas durante este procedimiento evidencian que se trató de una intervención formal y respaldada por la normativa, lo cual permite sancionar a los responsables y fortalecer el marco regulatorio. Estas medidas buscan equilibrar la actividad deportiva con la preservación de los ecosistemas acuáticos.
El operativo también envía un mensaje preventivo claro: quienes realicen pesca sin licencia, excedan los cupos permitidos o utilicen métodos indebidos enfrentarán la sanción correspondiente, incluyendo la remoción del material de pesca y de los peces capturados. La fiscalización en terreno es clave para garantizar el cumplimiento de la normativa.